viernes, 27 de septiembre de 2013

EL PSICODRAMA

El Psicodrama by moreneg21

LA TERAPIA CENTRADA EN EL CLIENTE.

La Terapia Centrada en El Cliente by moreneg21

TÉCNICA DE LA DERREFLEXIÓN

De los tres patrones patógenos que se distinguen en logoterapia hemos examinado hasta ahora dos de ellos; el patrón fóbico, caracterizado por la huida ante el miedo, y el patrón obsesivo-compulsivo. El tercer patrón es sexual neurótico caracterizado también por una lucha por parte del paciente. Aquí sin embargo, el paciente no está luchando contra algo, sino más bien por obtener placer sexual. La logoterapia afirma que "cuanto más se tiende al placer, tanto menos se le obtiene". Siempre que la potencia y el orgasmo son el objetivo de la intención, son también el objetivo de la intención. Los términos que utilizamos en logoterapia son los de "hiperintención e hiperreflexión". Ambos fenómenos se refuerzan recíprocamente de modo que se establece un mecanismo de feedback. A fin de asegurarse potencia sexual y orgasmo, el paciente se presta atención a sí mismo, a aquello que realiza y experimenta. En idéntica medida es retirada la atención prestada a la pareja y en cuanto ésta puede ofrecer en lo que se refiere a estímulos que pueden excitar sexualmente al sujeto. En consecuencia, disminuyen el hecho la potencia y el orgasmo. Esto a su vez, intensifica la hiperintención por parte del paciente y se completa así un círculo vicioso. Si se desea romper ese círculo vicioso, hay que hacer entrar en juego a fuerzas centrífugas. En lugar de aspirar a la potencia sexual y al orgasmo, el paciente ha de ser él mismo, entregarse. En lugar de observarse y vigilarse, se ha de olvidar de sí mismo; a fin de llevar a cabo este proceso.

LA TÉCNICA DE LA INTENCIÓN PARADÓJICA.

Desde 1929 hasta 1939 VIKTOR FRANKL a utilizado la intención paradójica , y más adelante fue transformada en una metodología. Desde entonces, la creciente literatura acerca de la intención paradójica ha demostrado que dicha técnica es una eficaz terapéutica en casos de neurosis obsesiva-compulsiva y de fobias. Para comprender la operatividad de la intención paradójica hemos de tomar como punto de partida el mecanismo designado "ansiedad anticipatoria"; un determinado síntoma evoca en el paciente una expectativa, llena de temor, de que puede repetirse. El miedo sin embargo, tiende siempre a provocar aquello precisamente que es temido y, por ello la ansiedad anticipatoria desencadena fácilmente lo que el paciente tanto teme que suceda. Se establece así un círculo vicioso automantenido: el síntoma evoca la fobia; la fobia provoca el síntoma y la recurrencia del síntoma refuerza la fobia. La reacción más típica ante el "miedo al miedo" es la "huida del miedo", la huida ante el miedo consiste en que el paciente comienza a evitar aquellas situaciones que suelen despertar su ansiedad. es decir huye ante su miedo. Este es el punto inicial de toda neurosis de ansiedad. Las fobias son debidas, en parte, al esfuerzo por evitar la situación en la que surge ansiedad. El desarrollo de una fobia puede evitarse enfrentándose con la situación que se comienza a temer. La "huida ante el miedo", como reacción al "miedo al miedo", constituye el patrón fóbico el primero de tres patrones patógenos que se distinguen en logoterapia. El segundo es el patrón obsesivo-compulsivo, mientras que en los casos de fobias , el paciente manifiesta "miedo al miedo", el neurótico obsesivo-compulsivo presenta "miedo a sí mismo", ya que no puede desprenderse de la idea de que puede suicidarse o cometer homicidio, o bien teme que los extraños pensamientos que lo acosan puedan ser signo de una inminente psicosis, si es que no la tiene ya. La misión que tiene que cumplir la intención paradójica, la cual puede definirse como un proceso mediante el cual el paciente es animado a hacer o a desear que ocurra, aquello que precisamente teme. De este modo conseguimos que el paciente fóbico cese de huir de sus miedos y que el obsesivo y compulsivo cese de luchar contra sus obsesiones y compulsiones. De cualquier modo, el miedo patógeno es sustituido entonces por un deseo paradójico. El círculo vicioso de la ansiedad anticipatoria queda así demostrado. En la práctica de la intención paradójica señala LAZARUS (1971), que un elemento esencial es la evocación deliberada del humor. Un paciente que teme sudar es animado a que muestre a los presentes cuanto es realmente capaz de sudar; que sude a choros, que moje de sudor a todo el que se arrime. El humor ha de ser considerado como una manifestación de la capacidad peculiarmente humana que es designada en logoterapia como autodesprendimiento. Como señala la logoterapia, la capacidad de autodesprendimiento (junto con otras capacidades la de autotrascendencia) es un fenómeno intrínseco y definitivamente humano, y como tal, elude cualquier tentativa reduccionista de referirle a fenómenos subhumanos. En virtud del autodesprendimiento, el hombre es capaz de bromear acerca de sí mismo , entregarse y abrirse al sentido de su existencia. La logoterapia enseña que el "miedo al miedo" induce a la "huida ante el miedo", y que una fobia se inicia realmente cuando este patrón de evitación patógeno se ha establecido. La intención paradójica suprime tal evitación dando lugar a una inversión total de la intención del paciente a huir de su miedo.